Así mismo, queremos transmitir un mensaje de aliento y solidaridad al escolta herido, a su familia y al conjunto del colectivo de escoltas, verdaderos ángeles de la guarda d cientos y cientos de mujeres y hombres en Navarra y Euskadi.
Por último, queremos animar al Gobierno a que, si esta es la apuesta de ETA y si entorno, renueve esfuerzos para perseguir a la banda terrorista y aquellos que les hace cobertura política. El Estado de Derecho no puede consentir pulsos en forma de extorsión, amenazas y violencia y, una vez más, ERA y s entrono no ha tomado la única decisión que todos esperamos; su completa disolución.
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