Entrevista a Angel García Undiano, Portavoz y Coordinador del Foro para el Relanzamiento del Socialismo Navarro. Fuente: Diario de Noticias (30/08/2007).¿Quiénes son y qué pretende el Foro para el Relanzamiento del Socialismo Navarro?
Somos cargos institucionales, miembros del Comité Regional, militantes de base y simpatizantes preocupados por la situación que está viviendo el PSN y que entendemos que tenemos que hacer un análisis interno autocrítico para analizar las causas del fracaso electoral del 27-M, aunque también queremos mirar al futuro. Creemos que este proceso debe culminar con una renovación de nuestra dirección política, ya sea en un Congreso extraordinario u ordinario.
En otras palabras: exigir responsabilidades a Chivite y su equipo tanto por el fracaso electoral como por la gestión del cambio.
Cuando se accede a un cargo de responsabilidad se hace para cumplir objetivos, si éstos no se cumplen y además llevas al partido a una situación de crisis como ésta, es evidente que tienes que asumir la responsabilidad de tus actos y marcharte.
Y si logran ese objetivo, es decir, cambiar la dirección del PSN, ¿cuál será su prioridad?
Elaborar un proyecto claro, basado en ideas claras y con una estrategia definida para alcanzar los objetivos marcados. Ésa será nuestra prioridad. Lamentablemente no llegó la hora del cambio a Navarra, pero nuestros ciudadanos y ciudadanas deben saber que vamos a cambiar el PSN-PSOE por dentro y por fuera. Lo vamos a poner en condiciones de pedir con humildad su confianza con la garantía de que no les defraudaremos. Deben saber que somos muchos los socialistas que no vamos a parar hasta que nuestro partido protagonice y materialice el cambio y para que nunca más haya dudas, no hemos de parar hasta que UPN salga del Gobierno foral. Se lo debemos a la mayoría social de progreso.
Pero, en la práctica, ¿eso implicaría retomar la senda con NaBai e IUN?
Hay que tener en cuenta que en marzo tenemos las elecciones Generales y ésa ha de ser una cita importante. Creemos que la dirección actual no puede encabezar la campaña en Navarra por su descrédito generalizado y la dirección en Ferraz deberá pensar en alguien que encabece las listas. ¿De cara al futuro? Pensamos que Navarra precisa del PSN una respuesta contundente en clave de renovación y esperanza y de no resignación ante las dificultades del cambio.
Instrumentos para adelantar eso existen, ¿moción de censura?
Aún no la hemos analizado. No la descartamos, pero habrá de ser el día a día de la acción de gobierno de Sanz la que determine si ése es el camino a tomar. Una moción de censura sólo se explica en función de las políticas puestas en marcha y no es un instrumento para usar a la ligera o con improvisación.
También habla de que habrá de ser Ferraz quien determine la estrategia y los nombres para las Generales en Navarra ¿No aspiran a mayor autonomía respecto a Madrid?
Por supuesto, pero eso ha de basarse en la confianza mutua no en cambiar los estatutos del PSOE porque la estructura del partido es la que es y no sería justo un trato diferenciado a Navarra. Dicho esto, sí es verdad que hay que establecer unas nuevas formas de convivencia que acepten la singularidad de Navarra y en ese aspecto hemos de llegar a un entendimiento que no produzca estos choques en momentos en los que la ciudadanía nos exige unos pactos que nosotros mismos defendemos.
¿Y cómo evitar que pase lo mismo?
Es una cuestión, sobre todo, de confianza en las personas. Ahí esta la clave de las relaciones entre Ferraz y el PSN. La actual dirección, es evidente, no ha sabido transmitir la situación real de Navarra y eso ha posibilitado la imposición de criterios ajenos.
¿Qué esperan de la comparecencia de Pepe Blanco el sábado?
Fundamentalmente que nos responda a una pregunta: ¿la dirección federal advirtió desde el principio a Puras y a Chivite de que no podía haber pactos con Nafarroa Bai para evitar inestabilidades? Si fue así, y nosotros creemos que lo fue, lo que es evidente es que el proceso de negociación ha sido el mayor engaño político que se ha producido en los últimos 20 años y eso es gravísimo.
¿Y si no lo comunicó desde el principio, el engaño sería menor? Me refiero a que Madrid avaló esas negociaciones para, finalmente, rechazar lo que dijeron que iban a respetar, es decir, la decisión del PSN...
No es lo mismo. Es responsabilidad de la dirección federal avalar la política de pactos. Ellos ejercieron sus funciones orgánicas según las impresiones que llegaban de Navarra. Sin embargo, era responsabilidad de la dirección regional diseñar, atar y hacer entender los pactos y, desde luego, dilatando las negociaciones 70 días lo único que hicieron fue crear una sensación de inseguridad y de desconfianza que ha terminado por dejar al partido ante la sociedad sin nada de credibilidad.
¿Van a pedir algo más a Blanco?
En función de lo que responda sí, evidentemente responsabilidades políticas. Pero hay que aclarar que el Comité Regional sólo puede pedir responsabilidades a la dirección regional. No puede pedir la dimisión del secretario federal de Organización.
¿Se ha pensado en quién podría ser el relevo de Carlos Chivite?
No, por ahora en lo que estamos trabajando es en un proyecto, en las ideas que lo han de sustentar y en la estrategia para hacerlo realidad.
¿Para cuándo debería celebrarse ese Congreso extraordinario?
Lo ideal es que se hiciera cuanto antes más que nada porque las elecciones generales deberíamos afrontarlas con una dirección y unos candidatos que tengan credibilidad.
Junto a su sector hay otro, también crítico, en la Ribera con el que ustedes quieren converger. Ambos piden dimisiones, pero ellos exigen garantías de autonomía respecto a Ferraz. ¿Es fácil esa convergencia?
No es simple. Nosotros no hemos pedido romper el carné, ni abandonar cargos, ni salir del partido, sino hacer la renovación desde dentro y ahora, más que nunca, desde la unidad. ¿Cambiar los estatutos? Es difícil sin generar desigualdades. Además, los planteamientos que presentamos van más allá del sábado y lo que buscamos no es romper el PSN sino reforzarlo y volver a dotarlo de credibilidad. De todas maneras estamos convencidos de que, en el fondo, todos queremos lo mismo y que será posible el entendimiento.
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